¿Los huevos dónde están?

Aunque antes de ingresar a la cancha el equipo estaba confiado con las chances del campeonato, y sabía que poniendo huevos podría depender únicamente de lo que Pancuca pudiera lograr adentro del campo de juego, durante el transcurso del partido se notó la falta de coraje de algunos jugadores para combatir a Granamar, al referee y al frío.
Una vez terminado el partido se pudo escuchar el reproche de varios hinchas respecto a algunos jugadores que, por frío, no se tiraron al piso a pelear ninguna pelota.
Una vez más, con los resultados adversos se escuchan los reproches y los errores que debería corregir cualquier equipo que aspira a ser campeón.
En esta última fecha se pudieron ver nuevamente las falencias que más le cuesta a Pancuca resolver: pelotas aéreas, defensa del medio campo, contención en los laterales y efectividad en las definiciones.
No obstante, hay quienes consideran que habría que ser menos rigurosos para juzgar individualmente a los jugadores por su desempeño en este último encuentro y tratar de analizar más los aspectos colectivos ya que el principal desafío no superado por Pancuca fue el de conservar la tranquilidad ante el pésimo arbitraje. Habrá que ver qué dice el entrenador durante la semana y cuál es su análisis del partido.