Ante el asombro de algunas pocas gallinas y el fervor de la mayoría de la ciudad, Carlitos "La Mona" Gimenez se puso la camiseta de Villa Mitre, colores que inspiraron a la casaca pancuquera.
Al ritmo de "Beso a Beso" toda la ciudad bailó cuarteto al mismo tiempo que unos pocos se amargaban sin entender por qué la mona optaba por colocarse esos colores si el que había llegado más lejos era el aurinegro. La explicación que dio el cuartetero después fue simple: "los campeonatos se compran, la pasión no".
Con esas palabras alcanza para sintetizar lo que se siente ser de un equipo chico, como Pancuca en la UTN. Y a las gallinas... cómo les quedó el ojo!
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