domingo, 27 de septiembre de 2009

Pancuca jugó con 8, empató y volvió el Cabaret

Si hay algo que no le falta a este equipo es sangre y corazón cuando entra a la cancha en desventaja. Si todos los partidos los jugara con la misma garra no habría lugar para otro campeón. Pero no es así. Los problemas históricos siempre se hacen presentes, en todas las temporadas. Alcohol, salidas nocturnas con excesos, despertadores que no funcionan, resaca... y toda la coreografía que ya nos conocemos de memoria. Pancuca podría haber dado una lección de fútbol, pero sólo dio una lección de orgullo.
Gandulfa entró a la cancha a sobrar el partido. Taquitos, sombreritos, mucho toque de lado a lado, pero en todo el primer tiempo pudo patear solamente dos veces al arco. Y en una de esas ocasiones vino el gol, que fue desde el punto penal. Después nunca pudo justificar su superioridad numérica. Así y todo, en el primer ataque después del penal, el Noma tras una brillante habilitación de Héctor (la figura de la cancha?) puso nuevamente la igualdad para traer calma a un Pancuca que estaba haciendo todo bien.

En el segundo tiempo, con dos llegaron tarde para compartir unas cervezas y se vieron obligados a entrar a la cancha aunque sea para hacer número (Neo y Pío) y el Pela que llegó para jugar aunque sea los últimos 20 minutos, Pancuca equilibró la cancha y hasta lo pudo haber ganado en dos mano a mano que tuvo Pío. Inclusive hubo dos claros penales (a Pato y a Peter) que el árbitro ninguneó lastimosamente, con lo que se podría haber logrado un resultado más justo, ya que desde afuera se vio claramente que solo Pancuca quiso realmente ganar el partido.

Igual cabe destacar la buena predisposición de Gandulfa a la hora de esperar a que Pancuca pudiera completar equipo para jugar, y luego permitiendo el ingreso de jugadores que llegaron tarde (el nuevo reglamento dice que no puede entrar nadie que no haya firmado la planilla antes de que comience el partido).

Hoy, tras un mail del Tomba llamando la atención de los ausentes sin previo aviso, Pico contestó y se armó nuevamente el puterío, lo que más une a Pancuca, que cada vez se parece más al partido peronista (como decía Cafiero, somos como una bolsa de gatos, cuando parece que nos estamos matando, en realidad nos estamos reproduciendo).

Bienvenido el cabaret de regreso a Pancuca!

2 comentarios:

salvador dijo...

NO HAY NINGÚN PUTERIO , MAL QUE TE PESE.

Jose dijo...

jaja contate otro, si te encanta el puterío